Capitulo 6º - Desierto Y Mas Desierto

06-06-2010 Desierto Erg Chebbi

RESUMEN

• Consumiciones hotel: Agua (8) botellas + Coca Colas (2) = 100 DH.
• Alojamiento Albergue du Sud , Una pasada de hotel como hubo un malentendido con el precio nos salió 600 DH media pensión los 2 por dia.Lo recomiendo 100 %.

RELATO

Sonó la alarma del móvil a las 4.30 y fue como si me darían con un palo en la cabeza…L

Pero el madrugón merece mucho la pena ¡Mi deseado desierto! Vamos en busca de Hassam, nuestro improvisado guía. Se despierta cuando estamos esperando, ya que duermen fuera. La mayoría de los empleados duermen a la intemperie, por lo menos pasan menos calor.

Es de noche y apenas se ve nada, Dani lleva la frontal puesta y seguimos a Hassam.La arena esta fresquita y es una gozada. Es alucinante como se orienta Hassan de noche por el desierto. Subimos y bajamos dunas, sin saber a dónde vamos, ya que no se ve nada. Yo como siempre como un pato mareado, me caigo sin importancia al subir alguna que otra duna.

Después de una caminata de 30 minutos más o menos llegamos a nuestro destino. Nos sentamos y esperamos a que vaya amaneciendo poco a poco. Comenzamos a ver camellos a lo lejos, que llevan turistas. Les llevan a las dunas para ver amanecer y resulta que les dejan más abajo que donde estábamos nostros, vaya ¡Katanga! En otras dunas se ven grupos de turistas, pero en la nuestra solo estamos nosotros.

A las 6:00 y pico comienza a salir el sol, y ¡oh, la la!, Impresionante.

Ver como el color de la arena cambia según le da la luz del sol. Parece que estas en medio de la nada, entre tanta duna, una pasada.

Estuvimos hasta las 8:00 de la mañana y después nos fuimos a desayunar.

Desayunamos y a dormir a la habitación. Dormiremos hasta que el cuerpo quiera, y a eso de las 12:30 nos despertamos.Así que lo mejor para hacer a estas horas es ir a la piscina a darnos unos chambetos hasta la hora de comer.

Después de comer otra siestilla, ya que con 50 ·C que hace o mas ,es lo mejor que se puede hacer en el desierto. Después de la siesta otra vez nos vamos a la piscina hasta la hora de volver al desierto, para hacer nuestra última incursión camino a la duna más grande que se ve desde el hotel.

La hazaña parecía más simple, pero las distancias engañan, Joder, ¡Qué Paliza!, llego descojonada, pero ha merecido la pena ver la puesta de sol desde la cima de la duna.

A lo lejos apreciamos las caravanas de camellos que lleven a los turistas a dormir a las haimas, Dani es cuando utiliza todo el zoom de la cámara, ya que están muy lejos.

Estamos hasta que anochece.Nos vamos camino del hotel a cenar después de darnos una duchita.

Allí comemos el mejor tajin de pollo que nos han servido hasta hora, y a la postre el mejor de todo el viaje. Solo quedaron los huesos… J

Después de cenar nos vamos a la calle y nos subimos a una duna que esta apartada un poco del hotel para ver las estrellas sentados en las sillas.

Tengo los ojos muy irritados por la arena del desierto, y solo quiero tenerlos cerrados. Dani aun tiene conjuntivitis desde aquel primer día que cenamos en el puesto de Marrakech con la humareda.asi que lleva desde aquel día sin poder ponerse las lentillas, menos mal que tiene gafas de sol graduadas. Así que estamos los dos con los ojos rojizos, vaya par.

Nos vamos a dormir a ver si mañana mejoran mis ojos.